16 octubre, 2017
Daño cerebral adquirido

Cuando se sufre un accidente cerebrovascular o ictus, es frecuente que se den alteraciones de origen motor que nos impidan caminar, o hacerlo con la destreza de antes.

Hemiparesia es el término que utilizamos para indicar que la parte izquierda o derecha del cuerpo del paciente ha sufrido una paresia, una ausencia parcial del movimiento voluntario, alterando el tono muscular, la sensibilidad y rango de movilidad de la persona.

La mayoría de personas que sufren una hemiparesia tienen más dificultades para caminar por terrenos irregulares. Los motivos son varios: la alteración del tono muscular, falta de coordinación óculo-motora, menor sensibilidad…

La realidad es que estos problemas impiden que la persona se sienta segura caminando por senderos, playas y superficies que puedan poner en peligro su equilibrio. ¿Y qué podríamos hacer para mejorar la estabilidad y equilibrio?

A continuación, un listado de 10 recomendaciones para que camines de forma más segura:

  1. Mejorar el tono muscular a través de ejercicios específicos, guiados por un fisioterapeuta especialista en rehabilitación neurológica.
  2. Valoración del patrón de marcha: cómo es tu postura cuando caminas, ya que seguramente compenses con tu lado sano.
  3. Identificar si es necesario utilizar una órtesis o punto de apoyo. A veces utilizar un bastón o férula nos permite caminar con mayor firmeza.
  4. Intervenir a tiempo cuando se detecte dolor muscular o contractura.
  5. Empezar caminando por superficie firme para progresivamente probar en terrenos más irregulares.
  6. Intentar que al principio los paseos sean acompañados.
  7. Las caídas son más frecuentes que antes, habla con tu fisioterapeuta sobre cómo es mejor levantarse en tu caso si esto sucede.
  8. Resérvate las prisas sólo para cuando sea necesario. Es más importante que tu forma de caminar tenga un patrón correcto, que hacerlo mal por ir deprisa.
  9. Descansa y pregunta por las mejores posturas para descansar y prevenir la hinchazón o dolor de piernas.
  10. ¡No dejes de hacer ejercicio! eso sí, siempre de manera moderada y buscando los deportes o rutinas más adecuadas para tu caso concreto.

Te orientamos

No importa si hace pocos meses que tuviste la lesión o han pasado años, si tienes dudas sobre cómo mejorar la estabilidad llámanos y solicita una primera visita. En ella un médico rehabilitador hará una exploración física y te dará los mejores consejos para que mejores tu estabilidad.

necesitas ayuda