En Clínicas Neural sabemos que las consecuencias provocadas por una lesión cerebral deben ser tratadas desde las primeras semanas para minimizar el alcance de las secuelas. 

Por esta razón, nuestras clínicas en están especializadas tanto en la recuperación de accidentes cerebrovasculares en niños, como en jóvenes y adultos. 

Y es que de acuerdo con el último informe realizado por FEDACE, el ictus es la primera causa de discapacidad en hombres y mujeres en edades adultas

Cierto es, que muchos de los factores que pueden aumentar las posibilidades de padecer riesgo no se pueden controlar (la edad, la historia clínica familiar, contexto social o sexo). Sin embargo, la mayor parte de ellos pueden ser cambiados, tratados o modificados.

Más aún, un alto porcentaje de personas afectadas pueden mejorar, e incluso llegar a normalizar su vida si siguen unas pautas y un tratamiento efectivo. 

Por eso en Neural tenemos a entera disposición de nuestros pacientes un equipo de rehabilitación totalmente especializado en neurorrehabilitación, y en la supervisión y seguimiento personalizado de los mayores expertos.  

La recuperación tras un Ictus

¿Es posible que una persona que ha padecido un ictus pueda llevar una vida normal? Desde luego existen muchas posibilidades para el paciente. ¿Lo más importante? Una estrategia eficaz y los mejores profesionales. 

Al principio, y durante los primeros seis meses, la estrategia que procuren los especialistas va a ser fundamental para garantizar la recuperación. 

Así, en la fase inicial las mejoras se consiguen gracias a la plasticidad cerebral y a los mecanismos que han desencadenado el ictus. 

Los expertos recomiendan empezar cuanto antes y una vez que el paciente esté médicamente estabilizado. 

Para conseguir el mejor resultado posible, el equipo de especialistas deberá trabajar conjuntamente para dar el mejor tratamiento acorde a la situación del paciente y teniendo en cuenta sus tiempos de recuperación. 

Desde neural, identificamos las dificultades que existen tras la lesión y en equipo ayudamos al paciente a: 

  • Comunicarse con facilidad.
  • Potenciar su capacidad de concentración.
  • Mejorar la fuerza y destreza muscular.
  • Ganar en independencia (aseo personal, desplazamientos, etc.)
  • Aumentar su autoestima.
  • Reencontrarse con el entorno laboral.
  • Recuperar la normalidad en la convivencia con la familia y entorno social.

Porque sabemos que la recuperación es posible, y queremos estar siempre la lado del paciente y de las familias.