La incidencia en España del traumatismo craneoencefálico (TCE) en los últimos 10 años ha sufrido un ligero retroceso. Pero el número de ingresos continua siendo muy elevado. Alrededor de 20.000 pacientes se ingresan cada año en España a causa de un TCE.
Las principales causas están relacionadas con accidentes de tráfico, accidentes laborales o caídas.
Lesiones tras un traumatismo
Las lesiones que produce un TCE pueden dañar diversas áreas del cerebro y afectar a las funciones motoras, sensoriales y neuropsicológicas. La funcionalidad del paciente en su entorno personal, social o laboral puede quedar muy mermada. Además, se puede producir una grave alteración de su funcionamiento cognitivo.
Los déficits que presentan los pacientes son muy variados. Su deterioro neurológico y funcional será una consecuencia de diferentes factores demográficos, clínicos y sociales.
¿Es posible predecir la recuperación cognitiva de pacientes con TCE?
En los últimos años, se han intentado identificar las variables asociadas a la recuperación de pacientes tras un daño cerebral. Así, la gravedad de la lesión, las complicaciones secundarias, el período de amnesia postraumática o variables demográficas y relacionadas con el tratamiento posthospitalario del paciente, pueden dar algunas pistas.
Aunque es difícil determinar las principales variables predictivas de recuperación, algunas sí han demostrado su capacidad predictiva.
Variables predictivas de recuperación
La localización y gravedad de la lesión, afectan directamente a la funcionalidad del paciente en cada área. Si las alteraciones afectan a zonas de la memoria, el lenguaje o el razonamiento, repercutirán en las capacidades sociales, laborales y personales del paciente.
Así, variables como la edad, los años de escolaridad y la gravedad de la lesión, son factores clave. Además, padecer un menor período de amnesia postraumática y de estancia en la unidad de rehabilitación del hospital o una mayor independencia funcional favorecen su recuperación.
La importancia de la neurorrehabilitación
Los avances médicos y tecnológicos favorecen el cuidado de los pacientes con TCE. Permiten una mejor monitorización del paciente durante la fase aguda y contribuyen a minimizar los déficits posteriores, mejorando el pronóstico de su recuperación.
Así, el tiempo que trascurre desde que se produce el TCE hasta el inicio de la neurorrehabilitación es fundamental. Llevar a cabo un programa de rehabilitación intensivo, integral y multidisciplinar permite una mayor recuperación cognitiva.
La rehabilitación neurológica es un tratamiento clave para la recuperación de las alteraciones motoras, cognitivas, conductuales y sociales que se dan como consecuencia de la lesión. En este sentido, en Clínicas Neural te podemos ayudar.
