Muchas de las familias que nos visitan han pasado por el duelo de descubrir que un ser querido ha sido diagnosticado con algún tipo de demencia. Los síntomas poco a poco van aflorando y comienza una larga travesía donde normalmente no se tiene mucha información y no se saben realmente cuáles son los primeros pasos que hay que dar. Sin embargo la demencia tiene tratamiento en las Clínicas Neural, está enfocado a enlentecer la aparición de nuevos síntomas y sobretodo, apoyar y dirigir a la familia en un momento tan complejo.
¿Qué se entiende por demencia?
Si atendemos a una definición estrictamente técnica, la demencia es un síndrome crónico que va deteriorando progresivamente la función cognitiva. Afecta a la capacidad de generar pensamientos, de tener memoria, orientarse, aprender, comprender, hablar y expresarse mediante el lenguaje.
Las demencias pueden ser de distintos tipos, como por ejemplo el Alzhéimer. Hay que destacar que las dos terceras partes de las personas con demencia tienen más de 80 años, por lo que estas enfermedades atacan sobre todo a personas de avanzada edad.
¿Cuáles son sus síntomas?
En nuestra clínica hemos tratado multitud de casos de demencia y entendemos las dudas que pueden surgir a los familiares. Cuando acuden a nosotros por consejo profesional nos cuentan sus experiencias y la frustración que les crea. Al principio son cambios bruscos de personalidad, que generan discusiones y malestar u olvidos exagerados.
Con el transcurso del tiempo el comportamiento cambia de manera muy notable. Lo que antes eran olvidos exagerados se convierten en una pérdida de memoria que empieza a ser importante. Los efectos ya comienzan a ser muy visibles: el pensamiento se ve afectado, el habla dañada, y esto varía notablemente el comportamiento. Si no se puede recordar, las consecuencias inmediatas son cometer errores y desorientarse.
La familia pasa por una serie de fases en todo el proceso: desde no saber qué está ocurriendo en los primeros momentos, pasando por el estupor y el aturdimiento al recibir la noticia del diagnóstico, el shock en los siguientes días, negación, rabia y desesperanza, hasta la aceptación y reorganización de la vida a la nueva situación.
Tratamiento en casos de demencia en Clínicas Neural
La demencia no tiene cura, pero esto no quiere decir que no se puedan manejar los síntomas mediante el tratamiento adecuado. Estos ayudan a retardar o, en su caso, a minimizar el desarrollo de los síntomas.
Existen medicamentos inhibidores de la colinesterasa como el donepezil, la rivastigmina y la galantamina que aumentan los niveles de la acetilcolina, un mensajero químico involucrado en la memoria y el juicio. La memantina es otro fármaco que regula la actividad del glutamato, sustancia que está implicada en el aprendizaje y la memoria.
Existen diferentes tratamientos con enfoques no farmacológicos:
– La terapia ocupacional incide notablemente en la adaptación a la vida diaria de las personas con demencia. Nuestros terapeutas les ayudan a enfrentar y manejar las situaciones, así como a adaptarse a la vida diaria.
– Modificar el medio ambiente del paciente para crearle un entorno sin ruido y ordenado en el que pueda enfocarse y desenvolverse mejor.
– Las respuestas y reacciones a los comportamientos de los enfermos con demencia son muy importantes para mejorar o empeorar su estado. Enseñar a familiares pautas para saber llevarlos y comprenderlos es nuestra tarea.
– Una organización y rutina diaria ayudan a reducir la confusión en los pacientes, así como dividir las tareas en pasos más sencillos en los que premiar el éxito, nunca el fracaso.
En este tipo de enfermedades, la asistencia profesional se hace obligatoria. Es una situación difícil y compleja a la que se le pueden aplicar diferentes soluciones. Si tienes un familiar con demencia, en Clínicas Neural estamos a tu disposición para atenderte, escucharte y aplicar los tratamientos adecuados.
