Tratamiento de la Dispraxia
04 octubre, 2018
Clínicas Neural

Cada vez son más frecuentes en las consultas médicas, niños/as con dificultades para realizar actividades y movimientos coordinados. Tareas como atarse los cordones, peinarnos, escribir o recordar hábitos cotidianos son fáciles y automáticas para la mayoría de personas. Otras, en cambio, padecen graves dificultades para realizarlas desde la infancia. Incluso pueden llegar a no desarrollar esta capacidad. Hablamos de las personas que padecen dispraxia.

¿Qué es la dispraxia?

La dispraxia es un trastorno del neurodesarrollo que afecta al movimiento y a la coordinación.  Conocido también como trastorno del desarrollo de la coordinación, suele diagnosticarse durante la infancia, aunque puede aparecer posteriormente tras una enfermedad o lesión. Así, las habilidades verbales, orales y motoras pueden verse afectadas por este trastorno. Por este motivo, los niños/as que la sufren, tienen dificultades para realizar actividades y movimientos coordinados, ya sean gestos sencillos o diferentes movimientos seguidos.

Esto se debe a que los mensajes que el cerebro envía a los músculos se interrumpen, causando estos problemas de movimiento y coordinación.

Causas de la dispraxia

Las causas que provocan la dispraxia no se conocen del todo. Se sospecha que se debe a alteraciones que suceden durante el neurodesarrollo en las que algunas áreas del cerebro no maduran correctamente. Así, los mensajes que el cerebro envía a los músculos se interrumpen, provocando problemas de movimiento y coordinación. Por esto, este trastorno está relacionado con el desarrollo de niños/as. Además, la dispraxia puede aparecer tras un daño o lesión cerebral.

Tipos de dispraxia y síntomas

La dispraxia se clasifica según la parte del proceso de movimiento o del organismo donde se produce la dificultad. Aunque existen diferentes clasificaciones, vamos a diferenciarla en motora, oral o verbal.

La dispraxia motora causa dificultades para coordinar determinados físicos. Se puede observar a la hora de escribir, vestirse o saltar. También en acciones cotidianas como atarse los zapatos.

Cuando una persona sufre dispraxia verbal, tendrá problemas con la coordinación voluntaria de sus músculos para producir sonidos y palabras. Por esto, a la hora de hablar es fácil que lo haga de manera lenta y con pausas frecuentes.

Si hablamos de dispraxia oral, los problemas observados estarán relacionados con los movimientos de la boca y la lengua. Por esto, puede tener dificultades para comer o tragar.

Diagnóstico de la dispraxia

Si observa algunos de estos síntomas en su hijo/a, no dude en consultar con su médico. Este realizará una primera valoración y, si es necesario, le derivará a otros especialistas. Para realizar el diagnóstico, es necesario la intervención de diferentes profesionales sanitarios. Logopedas (dispraxia oral y verbal), Terapeutas ocupacionales (oral y motora) o fisioterapeutas (dispraxia motora) serán fundamentales. Cada uno de estos profesionales utilizará diferentes herramientas para la evaluación en coordinación con el médico.

Tratamiento de la dispraxia

Aunque la dispraxia no se puede curar, existen diferentes estrategias para ayudar a mejorar este trastorno.Se trata de una combinación de diferentes terapias cuyo objetivo es mejorar su adaptación al medio, enseñándoles a realizar diferentes acciones o tareas.

En este sentido, la terapia ocupacional estimula e esta persona y contribuye a desarrollar su capacidad para el movimiento.

Otro apartado importante es la logopedia. Su objetivo es educar al niño/a y ayudarle a desarrollar la coordinación para emitir palabras correctamente.

Y por su puesto la fisioterapia, importante para estimular la coordinación de movimientos.

Además, existen otras terapias encaminadas a fomentar la autoestima del niño o a entrenar sus habilidades sociales.

Para ello, en Neural disponemos de un equipo multidisciplinar y cualificado, especializado en el tratamiento de la dispraxia. Profesionales en cada una de estas áreas que pueden ayudarle.

Puede solicitar una primera visita para que valoremos su caso.